¿Por qué nos cuesta tanto cambiar lo que no funciona?
Oct 15, 2021
Insistimos en seguir técnicas que nos invitan a simular, imitar, fingir o, aún peor, a creer que el cuerpo está desconectado de la mente. Está tan arraigado este camino que en la infancia, el proceso de aprendizaje se centra en el lenguaje, en la oralidad, en el vocabulario y a menos que se asocie con un comportamiento inadecuado desde la perspectiva social, para nuestra comunicación no verbal no hay formación.
¿Sabías que si investigas libros para enseñar lenguaje corporal a niñ@s, encuentras prácticas para educar el cuerpo como deportes, ejercicios localizados, cuidados higiénicos y actividades de expresión corporal asociadas al entretenimiento? Pero si cambias la búsqueda para enseñar la lengua materna o un idioma como inglés encuentras toneladas de libros que van desde diccionarios hasta guías gramaticales y de modismos.
Dato interesante: de acuerdo con las rutas pedagógicas convencionales, si lo que se buscas es profundizar en un idioma nativo, el proceso girará entorno a los efectos comunicativos y contextuales, cuestión que no se hace tan evidente a la hora de plantear la educación corporal como forma de comunicación; mientras que en la enseñanza temprana de una segunda lengua se vela el cuidado de la lengua materna, para evitar que l@s niñ@s preescolares tengan dificultades para comunicarse con los familiares o se sientan menos conectados a las tradiciones y la herencia de su núcleo social.
No hay huellas muy claras de que esto mismo se evidencie a la hora de postular una educación corporal en la infancia ni durante el desarrollo de la vida.
Dentro del campo pedagógico se ha delegado la responsabilidad de formar la corporalidad a la Educación Física, disciplina con un saber del cuerpo poco significativo debido a su predominancia orgánica y su enseñanza técnica. Las formas como se ha pensado el cuerpo en la educación se observan desde un área inmóvil y poco crítica; lo que nos conduce en Think & Talk a plantear presentar propuestas alternativas para pensar el cuerpo en la educación, teniendo en cuenta que es una característica que nos acompaña a lo largo de la vida.
El desafío aumenta cuando después de varias semanas de investigación de mi equipo, en la búsqueda de sustento académico para hablar de la corporalidad, encontramos contenidos que nos conducen al error como:
Como sé que de nada sirve enumerar los riesgos sin mostrar soluciones, he preparado un par de aproximaciones que te invito a desafiar:
Vamos a empezar por una errada interpretación de una medición, hecha por Albert Mehrabian que asigna pesos porcentuales a los componentes de la comunicación:
El psicólogo alemán concluyó en los años 80 que, cuando comunicamos emociones y sentimientos, más del 90% del mensaje recae sobre la Comunicación No-Verbal, sin embargo, como veremos más adelante este no es un dato para ver a la ligera.
Su investigación se transformó rápidamente en la conocida Regla de Mehrabian que dice que, en una conversación personal o íntima, solo el 7% de la información se atribuye a las palabras, mientras que el 38% se atribuye a la voz (entonación, proyección, resonancia, tono, etc.) y el 55% al lenguaje corporal (gestos, posturas, movimiento de los ojos, respiración, etc.).
El camino de la interpretación creció y la regla 7-38-55 empezó a regir las conversaciones en las que existían “emociones y sentimientos”.
El estudio que Mehrabian realizó con Morton Wiener, buscaba investigar cómo la gente juzga los sentimientos del emisor cuando éste dice algo incompatible con el tono de voz utilizado, los resultados indicaron que cuando la actitud comunicada por el contenido contradice la actitud comunicada por un tono negativo, todo el mensaje se juzga con base en una actitud negativa. Por lo tanto, el tono usado al hablar es más importante y significativo que las propias palabras individuales.
Quienes me conocen saben que no me quedo con una sola teoría, no me gusta el camino fácil y avanzando en la investigación me encuentro con Walbott y Scherer (1986), quienes se animaron a decir que estos resultados presentaban un desafío debido a que estos resultados no eran naturales, con lo cual coincido al 100% .
Sé que perdonarás que me torne académica pero entiende que para cambiar mentes se requiere LÓGICA y CREDIBILIDAD, además de la PASIÓN que es mi motor natural detrás de cada paso.
La razón es sencilla “la naturalidad se ve afectada”, para hacer esta medición se entregó a los participantes un contenido estándar y luego se les pidió pronunciarlo con varios significados emocionales por un micrófono, esto hace casi imposible obtener representaciones emocionales realistas.
Algo que más adelante en el 2002, fue ratificado por Jones y LeBaron (2002) quienes corroboraron que el modelo de Mehrabian era demasiado simple y no sé si como consecuencia de estas investigaciones o por otras circunstancias, el mismo Mehrabian solicitó públicamente que dieran uso correcto a su medición y que no se concentrarán en la afirmación falsa del peso superior del eje corporal en la comunicación.
Toda esta información te la comparto con tres objetivos:
- Entregarte argumentos que evidencian que las reglas están diseñadas para calcular centímetros o pulgadas, no para determinar el impacto de nuestros comportamientos ;).
- Contarte que aún hay mucho por investigar pero que por el momento (y como nos lo ha ratificado la imposición por necesidad del uso de la virtualidad), la corporalidad no es lo más relevante a la hora de comunicarnos correctamente.
- Insistir en que sin ideas, sin la necesidad o la intención de compartir algo, el cerebro no emite la señal para que esta acción inicie, éste almacena información pero necesita una activación neuronal para conectarse y activar tanto las partes que controlan los movimientos (incluyendo aquellos necesarios para producir el habla) como las responsables de las sensaciones internas y externas (sonidos, imágenes, tacto y las que provienen de los movimientos).
Fuente: Universidad de Puerto Rico
Comprobemos un ejemplo de ello juntos, observemos sin sonido las siguientes escenas de películas:
El valor del lenguaje gestual no puede cuantificarse a pesar de su importancia. Si al comunicarnos buscamos transmitir una idea puntual, por más dinámica y atractiva que sea mi corporalidad, de nada servirá si no tengo claro lo que voy a decir.
Y soy reiterativa en la invitación a analizar desde perspectivas distintas esa creencia de que lo que le funciona a uno, le sirve a todos, esta vez en nuestro marco corporal, hablemos por ejemplo de estas muletillas comportamentales:
Fotos tomadas de El Tiempo, El Mundo y El Colombiano
Te comparto una realidad: Cuando entrevistamos a un grupo de personas para saber qué les transmitía este gesto nos contestaron que lo asociaban con corrupción.
Y ahora es tu turno, vas a listar todos esos gestos o movimientos que consideras poco apropiados, esos que de acuerdo con la literatura y los mitos no pueden ser :), como taparse la cara o la boca con la cara, hablar con los ojos, hacer gestos poco amigables… en fin. El paso siguiente es revisar esta imagen y construir una historia de lo que le ocurre a esta persona respetando la secuencia de las fotos.
Foto de Andrea Piacquadio en Pexels
Me comprometí a compartirte una solución y es sencilla, te invito a que este ejercicio que acabas de hacer se vuelva una constante de observación y te garantizo que de esta manera tu corporalidad poco a poco se alineará con tu intención y emoción hasta convertirse en una aliada clave de propósito al momento de transmitir tus ideas.
Las palabras, la voz y el cuerpo tienen su punto perfecto en la coherencia, y esta potente característica va conectada con la singularidad y naturalidad de cada persona. Por el contrario, si un movimiento corporal es introducido de forma inorgánica, es menos probable que dé resultados positivos, de hecho la audiencia puede verlo y asociarlo con engaño.
Intuyo que si tus barreras y mitos no han cambiado después de leer, experimentar y ver estas letras que te comparto, al menos empezarás a observar a las personas con una óptica diferente. Esta es una dosis más de #ConCienciadecomunicacion que espero disfrutes.
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