Elige bien tu gurú

Este podría pasar de ser un blog a un memorial de agravios, con una fuente de inspiración poco positiva, pero de la cual espero que todos aprendamos:

Me entristece ver personas cercanas cuyos contenidos están completamente alejados de dar voz a sus ideas y de evidenciar este orgullo de hacer lo que amamos y lo que nos apasiona. 

Esto no es solo porque me plagian a mi o a otros autores, pues en realidad copian cualquier cosa que ven, lo cual se hace evidente en su falta de consistencia. Pareciera ser que simplemente se dan cuenta de que algo le funciona a alguien y en lugar de probar sus propias capacidades hace una débil imitación, alterada, subvalorada que pierde todo el impacto de la idea original.

No sé si esto les ayude a esas personas a abrir sus ojos y a que vean que cuando realmente buscas transmitir conocimiento, el proceso es tan inspirador, tan poderoso que no necesitas copiar. Cuando eres genuino y auténtico activas la capacidad de crear y compartir libremente con otros. Desde luego, puedes nutrirte de otros, de hecho es lo ideal, pero necesitas acompañarlo de tu propia huella, de tu propio condimento adicional, que no se construye parafraseando.

Esta vez, para aportar a la difusión, elijo el camino de construir. Preferí cambiar un desahogo por un llamado a la responsabilidad de quienes nos encargamos de darles importancia y de reforzar su pobre proceder. 

Porque quienes somos capaces de crear ideas y de compartirlas con otros para su crecimiento, somos nosotros, y al parecer estas personas - las que copian, fusilan o se apropian desvergonzadamente de esa ideas - simplemente se nutren de nuestro confianza en ellos y de nuestra ingenuidad.  

Sí, así como suena, cada día le damos más y más autoridad a cualquier persona y eso trae consigo la responsabilidad de entender a quién y por qué incrementamos su relevancia y hacemos eco.

Te invito a ver algunos ejemplos muy visibles que me ayudan a ilustrar esta conversación y a evitar la tentación de exponer las personas detonantes de este artículo :)

https://www.portafolio.co/tendencias/lista-de-los-plagios-mas-recordados-499978

Aparentemente, decimos que no nos gustan las mentiras, las copias, la falsedad, pero en realidad si analizamos esas voces que sobresalen, ¿nos hemos puesto en la tarea juiciosa de entender su sustento?, ¿empleamos las herramientas, los filtros y el criterio para saber si un nuevo gurú está diciendo algo realmente diferente?, es triste pero la mayoría de las veces solo consumimos contenido sin cuestionar, sin analizar las fuentes o su veracidad.. 

Me he puesto en la tarea de revisar con el equipo de Think&Talk algunas publicaciones digitales que se quejan del plagio y la sorpresa no es ver que sea cierto, (es lamentable, pero real, la gente no aprovecha su capacidad de abordar las ideas de una manera única), el desafío es cuántas personas elevan esta deficiencia, haciendo a veces más sonoro al que imita que a quien crea. 

Esta triste realidad en varios casos está relacionada con aspectos banales como la jerarquía, el poder o el alcance social de esta persona, de su marco relacional, o desafortunadamente no con su capacidad real de pensar y comunicar. En el lenguaje popular la expresión sería que esto ocurre gracias a su hábil manera de "cacarear".  

Esto no es una realidad asociada solo al contenido o al conocimiento. Este ejemplo callejero que les comparto a continuación, es la evidencia de la oportunidad creada para la informalidad / ilegalidad que se nutre por la incapacidad de hacer real un anhelo o de pagar lo que corresponde, excusándose en el alto costo y en muchos otros argumentos subjetivos: 

#nocaptionneeded

Entonces no solo tenemos que ser cautelosos con las #fakenews , también nos corresponde poner filtro a los #fakeauthors No no sirve trarer a la mesa la frase atribuida a Picasso respecto - al artista que copia y al genio que roba- , porque para emplearla se debe entender su contexto que es mucho más profundo, o como me han dicho en otras oportunidades “perdona, es que no sabía que este texto era de tu autoría, pero si quieres te puedo etiquetar”.

Puede que “todo ya esté inventado” pero la experiencia, vivencia y aproximación desde el conocimiento individual es única y es ahí en donde está el semillero de ideas; desde luego el conocimiento es para replicar, pero con respeto y responsabilidad.

Cada persona tiene lo que se necesita para encontrar un camino propio, único, pero la falta de madurez y confianza en sus ideas y muchas veces la comodidad de no pensar y de pegarse a algo que alguien ya hizo muy bien resulta aparentemente ganador. Pero ¿ese es el gurú que quieres?, ¿es en las ideas que copia de otros en donde está eso que estás buscando? Honestamente, no lo creo. 

A todos nos molesta la copia... en la vida académica, en la musica, en el arte.¿Si este es un comportamiento que no es bien visto socialmente, por qué lo aceptamos en algo tan delicado como nuestros campos de formación y de desarrollo personal y profesional?